Hay un montón de actividades en Sudáfrica interesantísimas que podemos hacer si nos atrevemos a hacer un viaje hasta esta maravilla de país del África austral.
Más allá de hacer el popular safari en Sudáfrica, este país cuenta con miles de actividades a tu disposición. Aventura, naturaleza y cultura en uno de los lugares más apasionantes del globo.
Hogar de los Cinco Grandes, en Sudáfrica no solo hay elefantes y leones, sino que también podremos disfrutar de leones marinos, pingüinos, tiburones blancos o ballenas.
Con museos y galerías de arte de primera, las ciudades de Sudáfrica son vibrantes y están llenas de actividades y opciones de ocio. Si le sumamos una naturaleza que te deja sin palabras a cada paso, pocos destinos hay más interesantes.
Yo te he seleccionado 10 de mis actividades en Sudáfrica preferidas, pero te prometo que hay muchísimas más cosas que hacer. Elijas lo que elijas, tengo claro que este rincón te va a sorprender y te va a dejar con muchas ganas de volver.
Índice
1. Conducir por la Ruta Jardín
La Ruta Jardín es una de las rutas por carretera más hermosas y famosas del mundo. De Ciudad del Cabo a Port Elizabeth, atraviesa valles llenos de viñedos, parques nacionales con los Cinco Grandes como el Addo Elephant Park, playas vírgenes y bahías.
Con entre 7 y 10 días podrás hacerla perfectamente y solo tendrás que decidir si quieres hacerla por el interior o por la costa. Las dos opciones son muy interesantes y si nos apretamos un poco es posible hacerla circular en dos semanas, yendo por la costa y volviendo por el interior.
Este tipo de viaje fly & drive es ideal si nos gusta conducir, aunque recuerda que en Sudáfrica se conduce por la izquierda. Además, aunque es un país seguro, es recomendable no conducir por la noche ni acercarnos a los barrios menos recomendables.
2. Nadar con tiburones en Gansbaai
¿Has pensado en tener a un tiburón blanco a un palmo de tu cara? Si te atreves, en Gansbaai, a una hora de Ciudad del Cabo, es posible.
Esta pequeña ciudad vacacional sudafricana se ha hecho famosa a nivel mundial por ser el hogar de los tiburones blancos. Por ello, hay varias empresas que dan la oportunidad de nadar con ellos en el océano.
No te preocupes, es seguro. Se hace dentro de una jaula. Antes, sobre el barco te ponen un traje de neopreno (el agua está bastante fría en Gansbaai) y tu oxígeno para poder sumergirte dentro de la jaula.
Una vez allí, tiran comida para que los tiburones se acerquen. ¡Es increíble verlos comer desde tan cerca!
Eso sí, ¡ni se te ocurra sacar la mano por la jaula si quieres conservarla!
3. Hacer un safari en globo en el Parque Kruger
El Parque Kruger es uno de los principales lugares del mundo para hacer un safari, junto al Serengueti en Tanzania y Masai Mara en Kenia.
De gran tamaño y con gran cantidad de lodges en el interior para todos los gustos y casi todos los presupuestos (los más bajos tendrán que conformarse con dormir fuera del parque y entrar cada día a las zonas comunes) es un lugar perfecto para ver leopardos, leones o rinocerontes, entre otros animales.
Más allá del safari en 4×4 o el safari a pie, que se pueden hacer perfectamente en el Kruger, si buscamos actividades en Sudáfrica más especiales, te recomiendo hacer el safari en globo. Ver la inmensidad del Kruger desde las alturas es una verdadera maravilla.
Coge tus prismáticos y veras animales que de otra manera nunca podrías ver desde tierra. Eso sí, asegúrate de ir en estación seca, ya que en la estación húmeda la vegetación impedirá que veas los animales más escurridizos.
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4. Conocer a los pingüinos en la Playa de Boulders
Tengo que confesarlo, los pingüinos me vuelven loca. ¡Son tan adorables! Por eso, una de las actividades en Sudáfrica que más me emocionó fue cuando los visité en la Playa de Boulders.
Esta playa está muy cerquita de Ciudad del Cabo y desde hace varias décadas hay una gran colonia de pingüinos africanos viviendo en ella.
El acceso está controlado y hay que pagar una pequeña entrada que vale unos 5€ al cambio. Con la entrada se puede ver tanto la Playa de Boulders como la de Foxy, donde también viven estas aves adorables.
En total, se estima que hay unas 2000 actualmente, llegando a ser mil más en la década pasada, razón por lo que son más estrictos con el número de visitas.
Por supuesto, no solo puedes ver a los pingüinos, también puedes nadar en la playa. Aunque ya te digo que cuando los veas, no querrás hacer otra cosa que seguirlos con la mirada.
El pequeño pueblo donde se encuentra, Simon’s Town, también es perfecto para dar un paseo o comer en alguno de sus restaurantes.
5. Visitar una bodega en Stellenbosch
El vino es otro de los grandes atractivos de Sudáfrica. Junto a Chile, Argentina y Australia, Sudáfrica es el mayor productor de vino del hemisferio sur y el noveno del mundo.
Los valles de Stellenbosch son el lugar predilecto de los sudafricanos para cultivar sus vides, con algunos de los caldos más populares del mundo. La capital de estos valles, Stellenbosch, destaca también por ser la segunda ciudad más antigua de Sudáfrica, justo después de Ciudad del Cabo.
Situada a solo 50 kilómetros de la anterior, es una excursión perfecta para ir a alguna bodega y probar los vinos sudafricanos, tan diferentes y con matices muy distintos a los que estamos acostumbrados.
6. Llegar hasta las Cataratas Victoria en tren de lujo
Una de las escapadas que me parecen más interesantes para una luna de miel en Sudáfrica y Mauricio es tomar uno de los dos trenes de lujo que van de Johannesburgo a las Cataratas Victoria, en la vecina Zimbabwe.
Podemos elegir el Blue Train South Africa o el Rovos Rail, cualquiera de los dos está entre los grandes viajes en ferrocarril de lujo más importantes del mundo. Con todas las comodidades y, eso sí, un precio no apto para todos los bolsillos, si te lo puedes permitir es una experiencia única que te acerca a una de las cataratas más increíbles del planeta.
Yo de momento no he podido hacer el recorrido, pero pude ver estos trenes por dentro en Johannesburgo y, desde luego, estoy deseando poder añadirlo a la lista. Además, las Cataratas Victoria son mis cascadas favoritas así que llegar en tren tiene que ser increíble.
7. Hacer un crucero para divisar ballenas en Hermanus
La bella ciudad de Hermanus está considerada la capital de las ballenas. Situada al sur de Ciudad del Cabo, cerca también de Gansbaai, la ciudad de los tiburones blancos, es un lugar de paso para los mayores mamíferos del planeta.
En concreto, son la especie de las ballenas francas australes las que pasan por esta zona, siendo habituales entre los meses de julio a noviembre. Al ser un animal migratorio, si vas de diciembre a junio será imposible que las veas ya que en esa época se encuentran por la Antártida.
Hermanus es el mejor lugar del mundo para ver ballenas y, además, tiene la particularidad que no solo se pueden en barco (aunque yo lo recomiendo). Si no quieres gastarte el dinero del crucero, también puedes divisarlas desde la costa. Aunque, eso sí, a una distancia mayor que la que tendrías en un barco.
8. Atraviesa en helicóptero el Cañón Blyde
Uno de mis must cuando me preguntan qué ver en Sudáfrica en 15 días es el Cañón Blyde. A medio camino entre Johannesburgo y el Parque Kruger, es el único cañón verde del mundo y el tercero más grande del planeta.
De hecho, es la razón por la que recomiendo ir en coche de Johannesburgo al Kruger en vez de coger un vuelo interno. Pues bien, sí ya es espectacular verlo a pie en sus diferentes miradores, hay otra actividad que multiplica el disfrute.
Me refiero, por supuesto, a una excursión en helicóptero para ver el Cañón Blyde desde el cielo. De esta forma podrás ver partes del Cañón imposibles de ver por carretera o en sus miradores, en uno de los paisajes más increíbles de toda África.
9. Conviértete en espeleólogo en las Cuevas Cango
Las Cuevas Cango son otro verdadero espectáculo de la naturaleza. A 30 kilómetros de Oudtshoorn, la capital del avestruz, se trata de unas cuevas con 100 millones de años de antigüedad que puedes visitar en gran parte.
Esta catedral subterránea cuenta con 16 metros de altura, 107 metros de largo y 54 metros de ancho y se puede recorrer en un recorrido de una hora, entre estalactitas, estalagmitas, grietas, embudos y gargantas.
Dentro de la ruta interior de la Ruta Jardín, desviarse para ver estas cuevas, que siempre mantienen una temperatura de 18 grados, es muy interesante.
Con estructuras de la Edad Media y la Edad de Piedra, es también una visita a la historia de esta región sudafricana.
10. Vuela en parapente sobre Ciudad del Cabo
Para acabar, ¿qué me dices de sobrevolar la bellísima Ciudad del Cabo en parapente? Suena bien, ¿verdad?
Desde la Montaña de la Mesa, una de las maravillas naturales del mundo, a ver toda la ciudad, la más bella y cosmopolita de Sudáfrica desde las alturas.
Y al acabar, ¡hay tantas cosas qué hacer en Ciudad del Cabo! Tanto desde arriba como a ras de suelo: el barrio malayo de Bo-Kaap, el Waterfront, el GreenMarket, el jardín botánico de Kirstenbosch, Patrimonio de la Humanidad… y un largo etcétera.
Espero que mi lista de actividades en Sudáfrica te haya inspirado. Recuerda que te organizo un viaje completamente a tu medida si te interesa disfrutar de estas o cualquier otra actividad.
Besos,
Sofía